Se nos suele olvidar que el agua con la que regamos nuestros adeniums
tiene un pH que hay que observar y analizar para que esté en el rango de
5.5 a 6.0 en la escala del pH, pues aunque el pH no influya en el
crecimiento sí que influye y mucho a la aparición de (por poner un ejemplo)
de clorosis férrica o el cambio de color de las flores de hortensia.
ENE